+de 200 KM/H P Por fin podemos decir, con más deje castizo que nunca, aquello de “De Madrid al cielo”. La frase –que lleva siglos escrita a fuego en el imaginario colectivo de madrileños y forasteros– cobra pleno sentido desde el pasado 25 de julio, fecha en la que Madrid entró a formar parte de la lista de Patrimonio Mundial de la Unesco. El Paseo del Prado y el Parque del Buen Retiro son los enclaves que se han hecho con el título. Aunque la distinción reconoce los valo-res de este espacio concreto –bautizado para la candidatura como Paisaje de la Luz–, el entusiasmo por la entrada de la capital en la lista de los tocados por la Unesco contagia todo el sentir de un Madrid dispuesto a conquistar la eternidad. Iván Cerdeño, el chef con estrella Michelin de El Pabellón de Florida Retiro. Patio de la am-pliación del Mu-seo Nacional Cen-tro de Arte Reina Sofía, proyectada por el arquitecto Jean Nouvel.