La iniciativa se enmarca en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) elaborado por el Gobierno para gestionar los 70.000 millones de euros en ayudas directas no reem-bolsables que recibirá de Europa, y se centra exclusi-vamente en las estaciones ferroviarias donde se pres-tan servicios OSP (Obligación de Servicio Público), unas 850 en total entre las dedicadas a estos servicios en red de ancho convencional (450) y a los de red de ancho métrico (400). En concreto, la compañía pública invertirá 118,5 millones de euros de los fondos Next Generation EU en digitalizar los sistemas de seguri-dad, mejorar la información para viajeros, adecuar las máquinas de autoventa y las instalaciones a las nuevas tecnologías y modernizar los controles de acceso para que puedan leer el móvil, cobrar directamente de la tarjeta de crédito, aceptar títulos de transporte de otros consorcios… “Es necesario adaptar las barreras de con-trol de accesos para permitir su franqueo al viajero de forma directa, sin necesidad de su paso por taquilla o máquinas autoventas. Se están realizando lectores de códigos de barras en núcleos de Madrid, Zaragoza y Asturias y, con esta actuación, se prevé completar el resto de los núcleos”, explica Renfe. Pago con ‘contacless’ Además de leer los billetes que se compran online a través de la app RenfeTicket o la página web, es decir, sin acudir a las taquillas o las máquinas, el operador ferroviario está mejorando su posicionamiento en el uso de la tecnología EMV Contacless como solución integrada de pago en el transporte público y ticketing. La implementación de este sistema permite al viajero abonar el billete en los controles de acceso directamen-te con su tarjeta bancaria, un método que ya está exten-dido en otros medios de transporte colectivos como el Metro de Londres, y que hace que el proceso de com-pra desaparezca agilizando el uso de los Cercanías. La apuesta por esta tecnología facilitará a Renfe la implan-tación del ticketing permitiendo así integrar la mayoría de sistemas de pago que existen en la actualidad. Este proyecto, al que destinará una inversión de 22,9 millo-nes en cinco años, además, permitirá al operador ferro-viario generar ahorros en tarjetas y papel para los títulos de transporte y minimizará el riesgo de impago ya que “el banco será el encargado de las operaciones de cobro a los clientes”, explica Renfe. Asimismo, de los 118,5 millones de los fondos europeos, Renfe invertirá unos 33 millones en tres años en la digita-lización de los sistemas de seguridad en las estaciones, un proyecto en el que ya llevaba un tiempo trabajando, y que persigue “dotar de inteligencia” a la seguridad median-te la instalación de cámaras para obtener datos y gene-rar alarmas en tiempo real que permitan evitar aglomera-ciones, fraudes, robos, ciberdelincuencia y controlar los aforos. Así, el operador apuesta por la analítica inteligen-te de vídeo para mejorar la seguridad en los núcleos de Cercanías de toda España. La mejora de los sistemas de información para viajeros es la iniciativa que más fondos europeos va a recibir, con 33,2 millones de euros. Tener acceso a información en tiempo real sobre la evolución del servicio de Cercanías es clave para mejorar la experiencia del pasajero, que pri-ma la certidumbre y fiabilidad a la hora de elegir un medio de transporte. No en vano, la frecuencia y la puntualidad son los principales atributos que debe cumplir el transpor-te colectivo para conseguir atraer viajeros del coche pri-vado, uno de los objetivos de Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR). Así, para Renfe es prioritario mantener a los clientes informados en todo momento del desarrollo de la operación (hora de llega-da, tiempo de espera), así como de las incidencias que ocu-rran en el día a día y de las posibles alternativas de movili-dad mediante interfonía, cartelería digital, avisos a la apli-cación (app)… +INNOVACIÓN Renfe prevé modernizar los controles de acceso a Cercanías para que puedan leer el móvil o cobrar directamente el billete de la tarjeta de crédito.