+de 200 KM/H Mirador de Pozo de los Humos. Peñera de la Ribera (Salamanca) La cascada más fotografiada Mirador del Embalse de El Atazar. Patones (Madrid) El mar de interior Mirador de la Sevillana. Ronda (Málaga) 04. La serranía al atardecer El escritor estadounidense Ernest Hemingway definió Ronda como un “auténtico decorado romántico”. Esta sentencia coge peso cuando se visita este impresionante balcón que se abre a la belleza natural de toda su serranía. Los locales saben que aquí hay una de las mejores vistas al atardecer de todo Málaga, pese a que no se observe desde su barandilla el Puente Nuevo. Lo que sí se puede disfrutar es de una panorámica del parador, de los acantilados y parte de las fachadas blancas que dan merecida fama a este lugar. + QUÉ HACER AQUÍ... Ronda, en sí misma, merece una parada de varios días. En esta localidad hay que conocer sus baños árabes, su plaza de toros, el palacio de Mondragón, la plaza duquesa de Parcent... Y cuando se tenga toda esta localidad pateada, salir a conocer pueblos como Benaoján, Montejaque, Benadalid... Mirador del Embalse de El Atazar. Patones (Madrid) 03. El mar de interior Puede que Madrid no tenga mar, pero sí disfruta de la calma y el poder visual del agua en lugares como el embalse de El Atazar. Con una presa construida en 1971, este lago artificial no solo es la principal fuente de suministro de la región (425,3 hm3 y el 46% del total), también una construcción de ingeniería épica. Su mirador, situado en la orilla sur, ofrece vistas a la Sierra Norte que, reflejada sobre el espejo fluvial, muestra una de las más bellas instantáneas de la cuenca baja del río Lozoya. + QUÉ HACER AQUÍ... Hay que visitar Patones de Arriba, uno de los más bellos pueblos de arquitectura negra de la Sierra de Ayllón, declarado Bien de Interés Cultural. Mirador de Pozo de los Humos. Peñera de la RiBera (Salamanca) 02. La cascada más fotografiada Una de las cascadas más espectaculares de toda Europa, se encuentra en el Parque Natural de Arribes del Duero, Salamanca. Con una caída de 50 metros sobre el río Uces, este mirador se asoma sin miedo a este fuerte golpe de agua que provoca la nieblina característica de la que toma su nombre. Es un lugar muy visitado, entre las localidades de Pereña de la Ribera y Masueco, aunque los días posteriores a las intensas lluvias bien podría parecer el Amazonas. + QUÉ HACER AQUÍ... Si queremos seguir viendo saltos de agua, hay que acudir al vecino Pozo Airón, también en Pereña de la Ribera, o disfrutar de este microclima mediterráneo entre enebros y jaras.