Rincón de la Victoria, mucho más que sol y playa Cuando elegimos las vacaciones, cada destino nos ofrece algo que lo hace único, diferente al resto. En este punto está Rincón de la Victoria, una pequeña ciudad marinera de la Costa del Sol Oriental que esconde muchas razones para demostrar que esta tierra es realmente especial. rincondelavictoria.es club renfe para RINCÓN DE LA VICTORIA La localidad de Rincón de la Victoria, a pocos kilómetros de Málaga, ofrece al visitante naturaleza y unos atardeceres únicos junto a sus acantilados, pero también oferta deportiva y cultural. Seguir leyendo Rincón de la Victoria está situada estratégicamente en la Costa del Sol, a pocos minutos de Málaga. Es una cuidad donde puedes encontrar todo lo que busques. Con casi ocho kilómetros del playa, es un municipio donde disfrutar del Mediterráneo en todo su esplendor, con unos acantilados únicos desde donde contemplar algunos de los mejores atardeceres del mundo. Una ciudad con una rica gastronomía, en la que el boquerón victoriano y el pescaíto frito se llevan la palma. Pero Rincón de la Victoria es algo más que sol, playa y buena comida. Como buena ciudad mediterránea, por ella han pasado fenicios, romanos y musulmanes. Aunque la joya de la corona del rico patrimonio histórico tiene algunas decenas de miles de años más: la Cueva del Tesoro, la única cueva visitable de Europa cuyo origen es marino –las otras dos se encuentran en México y China–. La historia, la arqueología y la leyenda se unen en sus galerías. A pocos metros de la Cueva del Tesoro, se encuentra la Cueva de la Victoria, un reto para los más aventureros, porque su entrada está catalogada como actividad espeleológica de turismo activo. Pero el patrimonio histórico de Rincón de la Victoria es mayor. Emblemáticas son su Casa Fuerte Bezmiliana, antigua fortaleza militar del siglo XVIII, y las dos torres almenaras, que datan del siglo XIV. Pero muchos siglos antes, los romanos dejaron claro que ya era el destino ideal. Villa Antiopa es un yacimiento del siglo III d. C. que guarda uno de los mosaicos mejor conservados de la época romana. Está claro que Rincón de la Victoria tiene naturaleza, gastronomía, patrimonio histórico, pero también ofrece una última sorpresa: la posibilidad de perderse por las encaladas calles blancas de Benagalbón, un núcleo de origen morisco, donde disfrutar de la paz que solo pueden ofrecerte los pueblos de interior. Y todo ello, a pocos minutos del que fuera el Mare Nostrum.