TRUJAL ERROIZ (Lanciego, Álava)17. El hermano mayor de la vid Dounia El Kouissi y Mikel Izaguirre son la pareja detrás de Erroiz, un proyecto que busca demostrar que, en materia de aceites, el norte también existe. En este “trujal” familiar, que es como se denomina en el País Vasco a la almazara, producen aceite de la variedad erroniz, tan poco conocida como potente en cuanto a sabor. Para dar a conocer su proyecto, nacido en 2018, pero también la larga historia del olivo en Rioja Alavesa –”el hermano mayor de la vid”, como lo llaman–, proponen visitas que incluyen un paseo por trujales tradicionales de Lanciego y finalizar con una cata en la que no faltan los pintxos. + QUÉ HACER AQUÍ… Lanciego es un pueblo lleno de encanto. Un paseo por sus calles no puede dejar de lado el huerto del Fraile. MUSEO DE LA CULTURA DEL OLIVO (Baeza, Jaén)16. Un parque temático del aceite Más que un museo, podríamos considerarlo un templo bajo el lema “todo lo que siempre quiso saber sobre el aceite y nunca supo dónde encontrar”. En el patio de este edificio hay un jardín con variedades de toda la cuenca del Mediterráneo. En su interior se encuentran todo tipo de ingenios de otras épocas relacionados con la elaboración del aceite, como vetustas prensas. Pero sin duda, en este gran edificio del s. XVII, destaca su bodega, conocida como la “catedral del aceite” y construida en 1848, ejemplo de arquitectura industrial con influencias centroeuropeas y símbolo del progreso del olivar andaluz en el s. XIX. + + QUÉ HACER AQUÍ… El centro histórico de Baeza enamora. Lo hace con la catedral de la Natividad, de estilo renacentista y con la fuente de Santa María, uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad.